EL FUTURO DEL EMPAQUE Y EMBALAJE EN 6 TENDENCIAS ACTUALES.

En el sector de empaques y embalajes se debe de hablar de la realización de cambios, aprovechamiento de oportunidades y adaptación rápida a nuevas tendencias. Ya que el empaque es el primer contacto del consumidor con la marca, el empaquetado de un producto va más allá de ser una protección para su traslado de un lugar a otro. También es una forma de presentación para la captación de atención del consumidor influyendo en su decisión de compra final, así como ser uno de los factores determinantes en la percepción del producto en el mercado.

1) Respeto al medioambiente en todas las fases del producto

La reducción de materiales, el uso de los reciclados y la utilización de biopolímeros provenientes de fuentes naturales, son el principal objetivo para reducir el impacto global. Ya que mejorar la sustentabilidad total analizando todos los componentes (materiales y energías), necesarios para el proceso de fabricación y minimizar el efecto medioambiental al finalizar la vida del envase es imprescindible.

2) El empaque, herramienta básica del marketing

La principal tendencia es “la interactividad creciente de los empaques, a través de las nuevas tecnologías y las redes sociales, que permiten convertir la experiencia de compra en una experiencia de marca.

3) Envases inteligentes y activos

El envase activo (que alargará la vida del producto) o el inteligente (que aportará más información al consumidor). Los envases inteligentes ya son una realidad, pero se están investigando en desarrollos de bajo coste para que su aplicación generalizada pueda llegar en el corto plazo.

4) Optimización: más eficiencia, menos costos.

Vamos hacia una cultura de consumo más reflexiva, y todas las empresas del sector papelero y cartón, tendrán que asegurarse de hacer sólo lo que justifica su esfuerzo económico y el del cliente y ofrecerlo a precio razonable. Aplicando las 3R (Reciclar, Reutilizar y Revalorizar) en el diseño del empaque y embalaje, pueden conseguirse importantes ahorros, además de contribuir a la disminución de la huella de carbono de los productos.

5) Reducción: menos es más.

Fácil, simple y claro. En el empaque aumentará la calidad de la expresión de la marca, y se expresa más por la vía implícita e intuitiva, debe ser más simple, más conceptual, porque a manera de actuar, el consumidor si no entiende el empaque, se va a otro producto.

6) Innovación en cada fase de la cadena.

Innovar e internacionalizarse, son la mejor decisión para dar viabilidad futura a las empresas del sector. La innovación se impone en mejores procesos más mecanizados o nuevas etiquetas, como las que incorporan tecnología RFID, con microelectrónica, para leer datos por ondas de radio sin necesidad de contacto.  La globalización de los mercados sigue forzando cambios en toda la cadena de producción, también en la adaptación del envase  o el almacenaje y traslado del producto.

La interrelación entre el sector de alimentos y el sector de empaque hace tan importante el conocimiento de estas tendencias, además de ayudarnos a definir nuestro foco creativo para el desarrollo de nuevos productos. El reto es asegurarse que su contribución a la competitividad del producto es la máxima, y eso es fruto de la capacidad de trabajar en colaboración, lo cual permite visualizar la posibilidad de dar respuesta a estas tendencias, además de conocer de primera mano si se apegan a nuestra realidad, en cuanto a productos, gustos y mercados.

Tú marca en las redes sociales.

La necesidad de innovar para diferenciarse en el mercado no sólo influye en el diseño del empaque, sino también en los cambios en el producto. Para las nuevas generaciones de consumidores existe una necesidad de innovar en todo sentido para lograr el posicionamiento deseado frente a la competencia, y son los mismos consumidores quienes se encargan de viralizar los productos en sus redes sociales, lo que da una gran exposición a las marcas en las plataformas que ya “pertenecen” a los usuarios. Ello le proporciona a la industria, una manera inteligente de estar en un mundo virtual al que no se puede entrar por la fuerza, si no innovando y creando tendencias entre los usuarios, consumidores y clientes potenciales.